I
Un niño se sienta sobre la calzada de la avenida Corrientes,
con la cara sucia de hollín y una ropita ajada y media curtida
El pide una moneda al que pasa
como cualquier otro niño en Caracas, Medellín o Budapest,
pero el tiene un pequeño bandoneón
y aunque la gente pasa indiferente
entre su nube invisible de canciones de Gardel, Lepera o Piazolla
el sigue y sigue tocando por Lavalle o por Florida
hasta juntar algunos centavos
en esta mala parte de un libreto llamada vida.
Foto: www.panamericanismo.org
II
Una gran pelea se anuncia en el Luna Park,
los policías pasan en motos y golpean salvajemente
a quienes reclaman mayor salario cerca del obelisco.
En una vitrina el asado se condimenta con la mirada del transeúnte,
los piqueteros pasean su hambre por la Avenida de Mayo
y marchan hacia la plaza
Un baile de tango en el boulevard para los turistas,
la gente se acumula a las puertas de los bancos
a clamar por sus cautivos ahorros.
En primera página Boca Junior contra River Plate,
en una página olvidada una madre en silla de ruedas
en huelga de hambre porque nunca hay un puesto para ella en el omnibus.
William Guaregua.
(Barcelona, Venezuela -1962). Poeta y narrador. Ingeniero egresado de la Universidad de Oriente de Venezuela, donde fundó el suplemento literario estudiantil El Mástil Roto (1986-1988). Dirigió por dos años (1997-1999) el suplemento cultural Fragua del diario El Oriental de Maturín. Ha publicado los libros de poesía: Sólo piel intensa (1990, Editorial Espada Rota), Cotidianas (1992, Departamento de Tecnología Educativa UDO-Anzoátegui), De tanto andar en solitario (1999, FUMCULTURA) y Pentadrama (2003, Litolila). Ha colaborado con diversas publicaciones periódicas, incluyendo la Revista Nacional de Cultura y ha escrito para diversas exposiciones de artistas plásticos de Venezuela. Actualmente reside en los Estados Unidos.
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