miércoles, 22 de julio de 2015

LA POESÍA DE JUAN FRANCISCO GONZÁLEZ-DÍAZ




Las Palmas de Gran Canaria: etnográfico ensayo.

El mar. ¡La mar!
Todo lo es el mar
en esta discreta y cosmopolita ciudad,
de persistentes aires tenues
que hablan hacia dentro.

El mar. 
¡La luz!, la luz del mar.
No hay punto alguno,
aquí,
que no sea de la mar.

Ufano orgullo:
“el mejor clima del orbe”.
Puntualiza el Catálogo Real,
de la gran Isla que redunda.

¡La luz! Toda del mar
-en ocasiones,
a veces,
hasta pobre-,
del henchido pueblo costero,
que casi todo lo pospone.
El buen tiempo,
constante,
y la socarrona manera de asentar
los más variados matices.

Verdes-azules, rojizos,
en el disenso intangible de los parroquianos
afanan
las muy acuciantes carencias
de  los entonces, 
alrededor
de mesurados aperitivos,
que favorecen.

Desmembradas de los volcanes,
las bravas olas,
incesantes,
irrumpen sin caricias.

El Atlántico,
de grises acerados,
¡inmenso!
sobre la tranquila ciudad,
en la que los vecinos no se sientan,
frente a las lontananzas de las aguas,
a disfrutarlas

Siestas sin grandes contrastes.
Insistente color de las aguas al sol.
¡Una ciudad,
encima de la mar!
Del libro de varios autores, Hotel Madrid. Poemas, 2013.


Sin el más leve apremio.
Acomodan al pobre invierno,
dejándole  un sitiecito,
al lado.
Urgido de socorros
lo arropan.
El lecho,
                 desvencijado,
acoge.
Ella,
         escanciada por los desencuentros,
odia los abruptos aguaceros.
Teme de los surtidores en las madrugadas.
Las ansias le andan a la luz del sol,
la aturden.
Él,
      sin el más leve apremio,
se lustra los ojos,
extendiendo
la dimensión de lo privado.
A pie firme,
vibra.
El aire,
            entero,
canta,
resuena.
Ya no hay sitiecito
para el pobre invierno.
Tenaz es la firmeza
en los arribos.
Rebozan
las vueltas del inicio.
En sus roscas
los minutos ríen,
                            relumbran.
Los dedos hacen huéspedes.
En el retorno,
dudan de abrir los párpados.
Con suspiros
cortamos el presente.
El silencio,
                    galante,
echa la llave
y se nos posa en los hombros.
Del libro Una mujer es… (2012).


No es necesario que llueva.
                                                   Para Edgar Morín: “…
Galantea
la barboleta,
en viene y va,
de rotunda compañía.
La tenue presencia
obsesiona.
Obliga a mirar.
Con aleteos
 bruscos,
aterciopelados,
irrumpe.
Desata nubarrones.
La tempestad desborda.
Mueve las paredes.
Trastoca.
La lluvia no es necesaria.
Una simple mariposita de primavera
vuela.

Del libro de varios autores, Una isla dentro, 2014.


Juan Francisco González-Díaz.

Psicoanalista y antropólogo. Cubano, residente en Las Palmas de Gran Canaria, Islas Canarias, España. Creador independiente
Poeta, narrador, promotor cultural, comisario y curador de exposiciones. Tiene publicado: Una mujer es… (poesía, edita NACE, Las Palmas de Gran Canaria, 2012). El Cabildo Congo de Nueva Paz (investigación antropológica, Editorial UNICORNIO, San Antonio de los Baños, La Habana, 2002). De Cuba te cuento, (cuentos, Editorial Plaza Mayor, Puerto Rico, 2002). Poesía y psicoanálisis, (ensayo, Ediciones Luminaria, Sancti Spíritus, Cuba, 2001). Hacer el silencio (poesía, Edita Ayuntamiento de Palos de la Frontera, Huelva, España, 1996). Nosotros los de entonces (cuentos, Colección Pinos Nuevos, Ediciones UNION, Cuba, 1994). La misma noche, (cuentos, Cuadernos de la Puerta de Papel, Centro Provincial del Libro y la Literatura, La Habana, 1993). Tocar en la aldaba (poesía, Ediciones Ateneo, La Habana, 1992). Caer del agua (poesía, Ediciones Ateneo, La Habana, 1991). Antologado en doce selecciones de poesía, en tres de narrativa y con poemas o cuentos, en más de veinte periódicos o revistas.
Ha impartido cursos de grado y de postgrados en psicoanálisis, antropología y literatura, en varios centros universitarios de Cuba y España.  Fue Mención Primer Concurso Nacional de Poesía Regino Pedroso, periódico Trabajadores, La  Habana, octubre 1996. Premio “Pinos Nuevos”, UNEAC, La Habana, 1994. Premio U Lietru de Catania, Academia Ferdinandea, Catania, Italia, 16 octubre 1993. Premio Ensayo Literario, Primer Concurso Provincial Proyectos Literarios UNEAC Prov. La Habana, noviembre 1990. Segundo Premio Cuento, Concurso Literario Nacional 17 de Mayo, ANAP, junio l987.
Preside el Centro Canario de Estudios Caribeños –El Atlántico– y su sello editorial “Cuaderno La Gueldera”. Coordina el Taller Literario “Espejo de Paciencia” y el Festival Atlántico de Poesía “De Canarias al Mundo”. Pertenece al Observatorio de la Lectura y Escritura en Gran Canaria.