lunes, 5 de octubre de 2009

FRUTOLOGÍA DE EROS

Tener a Ramiro Lagos, es un lujo para la Fragua. Gracias Maestro por estar aquí.

Lo saludo desde Buenos Aires

Juan Pomponio

PORTADA DEL LIBRO




“LA EMPERATRIZ DE LA CAMPIÑA”

( Piña de Santander, Colombia)

Como una emperatriz de la campiña
coronada de rayos, con su manto
de brocado de oro, yo te canto
tu realeza frutal, !oh rubia piña!

La patria con su emporio entre rapiña,
no te ignora del todo por tu encanto,
te saca el jugo…y tu valor es tanto
como una emperatriz que oro apiña.

Vasallo de tu gusto, raja a raja,
te acrisolo tu zumo. Te hago alhaja
con tus tajos de sol bajo la brisa,

para darte renombre, y quien te evoca,
sabe el placer de estar de boca en boca,
con tu jugo, tu miel y tu sonrisa.


LA PAPAYA FRUTA BOMBA

(Allá en Cuba} Eros se desenfrena, baje o suba
a buscar el amor, allá se anida
tras la hoja de parra apetecida
mientras hunde su pico de uva en uva.

Busca Eros, lo extraño: la curuba,
el zapote de fibra preferida,
el mamey, el anón, o la escondida
nuez del amor que se descubre en Cuba.

Bajo el papayo donde esta su trono,
Eros se desenfrena y da su tono
con ansiedad, pasándose de raya

y ardiente mima y chupa, y en su rito,
se arrodilla ante ella y crea el mito
que hay en la fruta bomba: !la papaya!


EL MAESTRO RAMIRO LAGOS



Frutología de Eros, poesía y pintura(2007).

Libro único de la literatura hispanoamericana. Es un acierto de trascendencia literaria y un logro del poeta colombiano Ramiro Lagos el haber entroncando su temario frutero tropical con el clásico LIBRO DEL BUEN AMOR escrito por el Arcipreste de Hita en el siglo XIV, época primigenia en que por primera vez en la literatura hispánica las frutas son encarnación de los dulces amantes. Fue una demostración de talento artístico del bardo poder concatenar el tema de las frutas del Arcipreste: Don Melón y Doña Endrina, hasta abarcar en tierra tropicales, tópicos similares que aparecen esporádicamente en nuestra literatura hispanoamericana hasta el siglo XXI, culminando con una obra excepcional, donde el poeta de la mano de Eros, románticamente se pasea por los edenes de su tierra nativa, Colombia, y de Sur América, para encontrase con la simbólica fruta cosmopolita de Argentina..
Se anota que en libro colaboran 14 pintores con 26 oleos y es un homenaje a la exuberancia de Nuestra America reflejada en sus frutas seductoras. Ahora el homenaje es para el maestro poeta incluyendo la loa a los maestros pintores de Santander, Colombia.

No hay comentarios: