IVÁN SEGARRA BÁEZ DE PUERTO RICO

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¿Cómo podré decirle que le amo,
sobre el regio desfile de sus labios?
Le amo entre la noche de las alas
y sobre la alfombra de mi cuerpo,
se ha sentado.
Todos los colores de sus ojos
se despiertan en mí
cuando le llamo.
¿Cómo podré decirle que le amo,
si se va a sorbos desnudados?
El misterio de su cabello
me ha dañado el alma,
de locuras y de sueños desbandados…
Aún aquí, en esta agonía sin paredes
se me viene el recuerdo
que le amo.
¿Cómo podré decirle que le amo,
sobre el regio desfile de sus labios?
Todo es silencio entre sus manos
y las mías locas por tocar
el capullo perfecto de sus labios.
¿Cómo podré decirle que le amo?
Con este misterio oculto entre
mis manos, mi boca y mis labios
que todavía no pueden decirle:
Yo te amo.

Biografía

Iván Segarra Báez es poeta, escritor, miembro activo del movimiento internacional Poetas del Mundo. Ha enseñado español en el Puerto Rico Tech Junior College, en el Prince George´s County Public School de Maryland y en el Departamento de Educación de Puerto Rico. Actualmente realiza estudios conducentes al grado de Maestría en Español en la prestigiosa Universidad Interamericana de Puerto Rico, recinto Metropolitano. Ha publicado varios libros de poesía: Candela (1997), Entre tu cuerpo y mi alma (2000), Hay veces que llora el mar (2001), El huerto de los salmos (2003) y Ante la luz de un amor prohibido (2005). Ha publicado además, dos novelas, El guardián de la lujuría (2002) y La república del generalísimo (2004) y un libro de ensayo titulado El lenguaje bicameral de la palabra (2008). Muchos de los poemas de Segarra Báez se encuentran dispersos en diversas revistas y periódicos de Latinoamérica y Europa. Iván Segarra ha visitado y presentado su obra en Argentina, Chile, Francia, República Dominicana y los Estados Unidos.

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¿Cómo podré decirle que le amo,
sobre el regio desfile de sus labios?
Le amo entre la noche de las alas
y sobre la alfombra de mi cuerpo,
se ha sentado.
Todos los colores de sus ojos
se despiertan en mí
cuando le llamo.
¿Cómo podré decirle que le amo,
si se va a sorbos desnudados?
El misterio de su cabello
me ha dañado el alma,
de locuras y de sueños desbandados…
Aún aquí, en esta agonía sin paredes
se me viene el recuerdo
que le amo.
¿Cómo podré decirle que le amo,
sobre el regio desfile de sus labios?
Todo es silencio entre sus manos
y las mías locas por tocar
el capullo perfecto de sus labios.
¿Cómo podré decirle que le amo?
Con este misterio oculto entre
mis manos, mi boca y mis labios
que todavía no pueden decirle:
Yo te amo.